Ya que el otro día deje plantada la historia sobre el viaje de mis vacaciones en Bruselas, sigo hoy un poquillo más alla, aunque no hasta el final. En este caso os voy a hablar del trayecto entre Bruselas y la ciudad de la Haya, la primera en Bélgica y la segunda en Holanda.

Después de dos días en Bruselas arrancamos hacia los siguientes destinos. La siguiente parada en el camino fue Gante. Es conocida como la Amsterdam de Flandes. Es una ciudad llena de canales y calles empedradas siempre rodeadas de los típicos edificios con forma de escalera en su tejado y de vivos colores. Algunos de los sitios que no os podéis perder son la catedral de San Bavón donde se encuentra la famosa obra “La Adoración del Cordero Místico", y además es un edificio digno de admirar por su construcción. También tenemos justo al lado la torre del campanario o Belfort, de más de 90 metros de altura y con unas vistas como imaginaréis impresionantes. El ayuntamiento también es digno de admirar con una fachada gótica y otra renacentista.


Después os podéis dirigir a El Graslei o muelle de las hierbas, y el Korenlei, o muelle del trigo, lugares idóneos para admirar las fachadas de las casas, pasear o tomar cerveza en una de las terrazas junto al canal. Estos muelles y canales son la típica estampa de postal que más representa a esta ciudad, asi que no os perdáis este lugar. Por último también destacar la visita al Castillo de los condes de Flandes o también conocido en Gante como Gravensteen. Respecto a los consejillos, os sigo recomendando los platos típicos de este pais, es decir, la cerveza, mejillones con patatas, gofres y por supuesto el chocolate, ya que en esta ciudad en concreto es donde nació el famoso praline.

Salimos de Gante hacía Brujas, una de las ciudades más conocidas de Bélgica, y no solo por su equipo de futbol ;). En cuantro entramos en la ciudad nos damos cuenta de que prácticamente es un pueblo encima de un rio, ya que nos encontraremos canales por todos lados, siempre transitados por pequeñas barquitas llenas de turistas, y casas alrededores de estos canales siempre llenas de flores de mil colores y muy vistosas. Una de las cosas que más me gusto tanto de Gante como de Brujas es que son ciudades practicamente peatonales, ya que practicamente todo está concevido para ir a pie o bicicleta y la ausencia de coches por la zona se nota bastante comparado con nuestra tierra. Otra cosa que llama bastante la atención también es el respeto siempre por el medio ambiente, encontrando zonas verdes, lagos, canales, mil y una flores o incluso pequeños bosques mezclandose con la ciudad, haciendo de estas dos ciudades un lugar de cuento de hadas al más puro estilo la Bella y la Bestia. Otra de las opciones que se nos dan es el alquiler de carruajes, pequeñas barcas siempre con conductor o bicicletas, todas ellas recomendables, en especial el alquiler de la bicicleta, ya que además de ser más barato podéis ver con mucha más calma cualquiera de los lugares, además de tener mucha más accesibilidad a cada sitio, ya que hay muchos sitios impresionantes a los que con las barcas o carruajes no podréis llegar.


El sitio más visitado de la ciudad es la plaza mayor, siempre muy parecidas a la ya vista en Bruselas, pero esta con más amplitud, edificios más bajos y mucho más típicos. El edificio más impresionante de esta plaza es el Torreon del campanario de 83 metros de altura, que hará las delicias de los turistas con su carrillón tocado por de 47 campanas de más de 27 toneladas en total. Otro sitio interesante para visitar es la plaza de Burg, en donde se encuentran la basilica de la Santa Sangre, el ayuntamiento, una antigua escribanía renacentista y un palacio del siglo XVI.


Otro de los sitios casi obligados de visita es la catedral de San Salvador, que es la iglesia más antigua de Brujas, en la que destaca una torre de más de 100 metros de altura. Respecto a la gastronomía de está ciudad os recomiendo lo mismo que las anteriores, pero con especial ahinco los gofres, ya que aquí son más baratos que en Bruselas y están igual o mas buenos que alli.


Otra cosa que os remiendo totalmente es que si podéis quedar por la noche os quedéis, ya que la ciudad está practicamente vacia y podréis disfrutar del paseo mucho más, además de que por la noche con la luz indirecta los lugares resultan más bonitos aun. Os dejo unas cuantas fotos de mi cosecha de la noche de Brujas, para que veais de que os hablo.


La siguiente parada fue la ciudad de Amberes. Esta ya mas cerca del mar y de los Paises Bajos. Su cercania al mar ya se empieza a notar bastante, pudiendo apreciar numerosos barcos de mercancias en el rio que cruza de punta a punta la ciudad. Además también podremos ver en la mayoria de cafeterías menús basados en pescados, mariscos, o los ya típicos mejillones con patatas.Lo que no os podéis perder en esta ciudad para visitar son la catedral de Nuestra Señora y la Plaza Mayor. La estación de tren y el castillo (Steen, antiguo castillo de torturas)que hay justo al lado del rio también son muy interesantes. También podeis visitar la casa museo de Rubens, aunque en nuestro caso no lo hicimos ya que ibamos con el tiempo algo justo y además no es que yo sea muy aficionado a la pintura (y eso que me encanta la fotografia que es parecido). Otra cosa que me gusto mucho fue un restaurante al que fuimos a comer cerca de la catedral y que tenía una estética peculiar, ya que era muy parecido a una cueva, todo iluminado con velas y con mesas de madera. Si alguno quiere ir la verdad es que no se la dirección, solo se que está en un callejón que hay a mano derecha mirando de frente la catedral.
Después de este lugar nos dirigimos hacia la ciudad de La Haya ya en los Paises Bajos, no sin antes pasar por la pequeña ciudad de Middelburg y los impresionantes diques de Holanda del Sur. Estos se encuentran la mayoria siempre abiertos y solo se cierran cuando hay tormenta o mareas muy fuertes, para evitar que el pais quede inundado, ya que no se si lo sabéis, pero práctimente todo el pais de Holanda se encuentra entre 2 y 7 metros por debajo del nivel del mar, de ahi la construcción de estos diques, para ir ganandole terreno al mar y poder secar las tierras para el cultivo. Como habréis visto en mil y una postales es muy común ver molinos en Holanda, pero al contrario de lo que la gente cree su función principal no es moler el grano (aunque también se usa para esto, tampoco nos vayamos a equivocar) sino traspasar el agua de zonas más bajas a otras mas altas, y de estas a rios y canales, para intentar tener la mayor parte de tierra seca posible. Después cuando la marea baja las compuertas de los diques se abren y el agua es echada al mar, para que cuando suba cerrarlas y mantener seca la zona. Una vez pasados todos estos diques llegamos ya a la ciudad de La Haya (otra de mis preferidas de todo el viaje, aunque desconocida para la mayoria de turistas como punto atractivo). Este lugar prefiero mostraroslo con más calma en el siguiente post, ya que me enrollé demasiado en este y se va a hacer muy pesado ya, además así también os tengo en vilo de cuales serán los próximos destinos jeje.

Para los más vagos y los que no les apetezca leerse este tocho les dejo aqui un pequeño video que encontré por YouTube con un resumen sobre los tres lugares. Espero que os guste y hasta otra...