Todas las culturas y pueblos tuvieron una civilización anterior que suele marcar bastante a los nuevos pobladores y sus costumbres. Por poneros un ejemplo por el sur de España es muy fácil encontrar restos de la época en que estaban poblados por los árabes, en Segovia y otros sitios del interior restos Romanos (como en media España) y de esta forma iremos encontrando restos de civilizaciones anteriores por casi cualquier parte de nuestro país. Pero cuales son los restos predominantes que tenemos en Galicia??.
Restos de su civilización y origen
Los más numerosos y espectaculares restos suelen ser los romanos como la muralla de Lugo, o de la época medieval como los numerosos castillos desperdigados por todo nuestro territorio, pero unos de los más importantes que tenemos en Galicia son los restos Celtas, también bastante numerosos y muy bien conservados gracias al difícil acceso de otros pobladores y a nuestro afán por conservar todo lo antiguo y místico. Entre estos restos tenemos varios muy importantes a nivel Europeo e incluso mundial y de gran tamaño como son los castros del monte Tecla o el complejo llamado Castro Baroña.
Sus casas son muy características y se diferencian rápidamente del resto de culturas. Su principal característica es que son casas de piedra de forma circular y con el tejado de paja, suelen tener en la parte de afuera una especie de horno y las callejuelas que separaban unas casas de otras eran muy estrechas y reviradas.

Pero quienes eran los Celtas y que diferencias tenían con el resto de culturas del momento??
La palabra Celta originalmente significaba “héroe” y se cree que este es el origen de esta amplia cultura que pobló nuestras tierras alrededor el año 2000 a.C., exactamente en el fin de la Edad de Bronce. En esa época se trataba de un pueblo guerrero que dominaba el hierro y se extendieron por el centro de Europa, las Galias, Britania e Iberia, transmitiendo su idioma y costumbres a las distintas poblaciones que conquistaron. Sus leyendas de misterio y sus costumbres ancestrales son muy famosas aquí y de ahí que podamos ver en numerosas tiendas de recuerdos trisqueles y otros símbolos de esta cultura. Sus numerosas historias recuerdan incluso a las contadas en el Señor de los Anillos por los elfos, en los que siempre el tema principal estaba relacionado con la naturaleza. Asombrosos paisajes en los cuales el rumor del viento al cruzar los bosques crea un sonido particular, el constante ruido del caer del agua de las cascadas, la furia imperante del mar u otros temas muy utilizados en sus leyendas crean el ambiente perfecto para que existan personajes mágicos que conviven con aves con cantos melódicos, vegetales que brillan o insectos que alumbran las noches encantadas.
Idioma y costumbres
Según los relatos recuperados de los mismos celtas se cuenta que alcanzaron su época de auge en la Edad del Hierro y fueron transmitiendo su idioma, costumbres y religión a los distintos lugares que han conquistado. Al contrario de la creencia popular los celtas no eran un pueblo guerrero o agresivo sino todo lo contrario, se caracterizaban por su lealtad, ánimo y orgullo en la lucha y al mismo tiempo por su gran sentido por la música, la poesía y la filosofía. De esta cultura salieron los famosos bardos o incluso instrumentos ya tan tradicionales en nuestra tierra como la gaita, flauta o incluso el arpa. Curiosamente en Galicia quedo muy arraigada esta cultura musical llevandonos a ser una de las lugares con mayor variedad y calidad de grupos de música celta a nivel mundial, junto con los Irlandeses, escoceses y franceses, con autores tan importantes como Carlos Nuñez, Susana Seivane o Luar na Lubre.
A diferencia de muchas otras culturas, los celtas han sabido mantener la tradición oral con el paso de los siglos y a pesar de que casi toda su cultura fue extinguida por los romanos desde César hasta los cristianos, aún conservan algunos rasgos de sus inicios. En Galicia se conservó especialmente por lo que os comentaba del difícil acceso, con lo que era más difícil de conquistar por tropas externas y las culturas permanecían durante mas tiempo que en el resto de España. Debido a este hecho es en Galicia donde aun se conservan más cantidad de restos celtas, mientras que en la mayoría de España fueron destruidos por los nuevos invasores o por la dureza del clima.

La raza de celtas que vivía inicialmente en Galicia, era conocida como “Brigante”, la cual le dio nombre a Brigantia (actualmente A Coruña). Como sabréis esta raza entró en Galicia por el mar proveniente de Irlanda y se dice que la actual torre de Hercules fue construida para avisar a los barcos pero al mismo tiempo para poder ver desde su punta más alta su tierra de origen, Irlanda justo en frente mirando hacia al mar. También existe la fuerte creencia de que nuestro característico acento y el sonido semi-nasal que hay en el portugués y gallego, tiene sus orígenes en la lengua celta, de la cual aún conservan algunas palabras ambas lenguas Un ejemplo es la palabra usada en algunas zonas de Galicia bruire que significa hacer ruido o zumbar, o incluso la palabra landra, ya mucho mas común que en castellano se dice bellota. Lamentablemente no se conoce mucho acerca de la vida diaria, la religión o la organización política de los celtas, pero lo que sí se puede ver es que existen costumbres que permanecen hasta nuestros días y sus antiguas leyendas poseen un eco característico que permite reconstruir algunos aspectos de la vida privada y pública de las personas.

Características de su civilización
A diferencia de la mayoría de antiguas civilizaciones en las que la mujer apenas tenía importancia, en esta cultura si tiene una mejor posición, pero al igual que en otros pueblos guerreros, se encarga sobre todo de las labores de casa y realiza tareas como artesanías y agricultura (muy apreciadas en la época). Al igual que en la mayoría de lugares actuales los celtas no consideraban a la mujer por debajo del hombre. Estás podían escoger a sus amantes y la virginidad no era un papel tan importante como sí lo es en la cultura cristiana o musulmana. Para la época en la que vivieron eran una cultura muy avanzada en este sentido y parecida a la actual, en la cual la mujer que era madre, era vista como una diosa protectora. Otro de los rasgos que sorprende de la cultura celta, es que la libertad individual es importantísima, por lo que apenas existían exclavos. Normalmente cuando conquistaban una tierra se mezclaban con los sus ciudadanos en vez de masacrarlos como solían hacer el resto de culturas.
Es curioso que los enemigos de los celtas los conocieran como los “hijos de los vientos”, un nombre poco temible y hasta podría decirse elogiador. Cuentan sus leyendas que Rudra, el fuertes viento de las tormentas, era su padre porque se arriesgaba en la lucha haciendo prácticamente volar a sus salvajes caballos. El orgullo de los celtas quedaba patente cuando aun en inferioridad de tropas preferían morir que la derrota.
Gastronomía
Otra característica destacable de los celtas era su estusiasmo por la comida, de la cual hemos heredado gran parte de manjares. Ya en esos siglos al igual que ahora el vino tenía gran importancia en nuestra tierra, además de una especie de cerveza realizada con trigo y mezclada con miel. En épocas de paz se realizabas grandes festines al puro estilo de los comics de Asterix y Obelix en los que se juntaba todo el pueblo (en cierto modo, Galicia tiene mucho parecido con este comic, ya que en parte también fuimos una parte de España "irreductible" frente a muchos invasores y al mismo tiempo compartimos mucho parecido respecto a los paisajes y edificaciones de este comic). Estas festines siempre eran animadas con liras, gaitas y otros instrumentos y en los que se cantaban canciones con temas relacionados con amores trágicos y héroes que murieron en sus combates. Para comer se utilizaban los dedos y alguna vez se ayudaban de sus puñales para cortas los trozos mas duros de comida. Los platos típicos eran el jabalí, la vaca, cerdo y el buey (como veis no muy lejos de lo que os decía de Asterix jeje). En vez de patatas (alimento que se trajo de América) acompañaban sus platos con mantequilla, queso o miel (igual que se sigue haciendo en la actualidad en muchas partes del norte de Europa), y siempre todo esto regado por un buen vino, cerveza o incluso licores.
Al contrario que en los comics de Asterix y la cultura que nos dejaron los romanos los celtas no son pueblos guerreros, sino que sus vidas estaban mas orientadas a la ganadería, agricultura y por supuesto al mundo mágico y espiritual, en el cual destacaron los druidas, famosos por sus ungüentos curativos y pócimas. Para ellos esta concepción de la naturaleza era una religión, la cual dotó a su civilización de una comprensión mitológica de la existencia.
Fuente fotos: Google Images
Os dejo aquí además un video sobre los dioses íberos y celtas con una buena cantidad de fotos y leyendas directamente relacionadas con Galicia